Los sectores golpistas que este domingo sacaron de la presidencia, con el uso de la fuerza, al presidente constitucional Manuel Zelaya decretaron el estado de toque de queda con la intención de frenar la acción popular que exige sea restituido el orden legal del país y el retorno de quien denominan "el presidente de los pobres".
"Queremos que nos entreguen a Mel", claman los hondureños movilizados en las calles del país haciendo referencia a Manuel Zelaya.
La medida de toque de queda se produce minutos después que el Congreso se atribuyera la potestad de juramentar a Roberto Micheletti como presidente, en sustitución del mandatario Manuel Zelaya.
Catalogada de ilegal por el pueblo hondureño y rechazada ampliamente por la comunidad internacional, la juramentación estuvo rodeada de los aplausos de miembros del Congreso que negaron la voluntad de los más de 400 mil ciudadanos que promovieron la iniciativa electoral prevista para este domingo.
Amable de Jesús Hernández, dirigiente social, confirmó a teleSUR la entrada en vigor del toque de queda y relató que incluso una patrulla militar intentó decomisar las urnas de la consulta popular no vinculante, ante lo cual el pueblo se atrincheró y los uniformados tuvieron que retorceder.
"El pueblo se atrincheró, el pueblo está indignado en las calles y no acepta que el presidente haya sido tratado así", dijo desde el municipio Santa Bárbara, en la capital hondureña.
Relató que en todo el país el pueblo está saliendo a votar masivamente en la encuesta que había sido propuesta por el derrocado presidente Manuel Zelaya, para incluir una cuarta urna en las elecciones generales del próximo 29 de noviembre, pese a los intentos de los militares golpistas para impedirlo.
"Es increible que después de 28 años de vida democrática nuestro pueblo tenga que esconderse para depositar un voto (...) tenga que esconder las urnas", denunció.
"Ellos (los militares) quieren a punta de fusil y punta de balas doblegar al pueblo", añadió.
Sobre los congresistas que apoyaron este domingo la aprobación del decreto ley que inhabilitó al presidente legítimo Zelaya y elevó como Jefe de Estado de facto al hasta hoy presidente del Legislativo, Roberto Micheletti, Hernández dijo que son "traidores", que se han convertido en enemigos del pueblo y que por ello serán castigado en las urnas en los comicios de noviembre.
"Ellos como diputados se han convertido en enemigos (...) (el pueblo) no aceptará nunca al señor Roberto Micheletti como presidente", dijo el líder social.
Detalló que debido a la suspensión de los servicios de televisión abierta y eléctrico, se han informado de lo que ha pasado en su país a través de la pantalla de esta casa periodística.
teleSUR/YR-MM